Después que el periodista Andersson Boscán, del medio digital La Posta, reveló la mañana del martes que en uno de los celulares encontrados en el crimen de Rubén Cherres se hallaron fotografías de seguimiento a él y a su familia, y por ello responsabilizó al presidente Guillermo Lasso por lo que pudiera ocurrir con sus vidas, la Secretaría General de Comunicación de la Presidencia (Segcom) difundió un comunicado en el que se calificó de “maliciosa aseveración” a lo dicho por Boscán.

En el documento publicado en redes sociales se señaló que el Gobierno “considera inaceptables las declaraciones que hizo esta mañana el ciudadano Andersson Boscán, en la plataforma digital La Posta, en relación a que “se planificó un atentado y luego el Gobierno lo encubrió”, según sus elucubraciones, contra él, y el periodista y candidato presidencial Fernando Villavicencio”.

Según Carondelet, se pretende “construir la narrativa de una supuesta e inexistente persecución del Gobierno en su contra o en contra de periodistas de investigación”.

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De ese modo, el Gobierno rechazó lo dicho por Boscán y además aseveró que “jamás se ha hostigado, perseguido o enjuiciado a comunicadores, políticos o ciudadanos”. Que el Ejecutivo siempre ha sido respetuoso de la libertad de expresión, “incluso ante declaraciones que fácilmente pueden ser consideradas como infamias”.

A renglón seguido, el comunicado de la Segcom también se refirió a las investigaciones que la Fiscalía emprende contra el medio digital por presuntos delitos económicos. Al respecto, se dijo que esos procesos son un “asunto exclusivo de la Fiscalía en el que el Gobierno no tiene ninguna injerencia”.

El Ejecutivo afirmó que el periodista Andersson Boscán, quien abandonó el país con su familia debido a amenazas, mientras estaba en Ecuador “contó con una cápsula de seguridad provista por la Policía Nacional”.

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“El Presidente de la República, Guillermo Lasso, y el Gobierno Nacional reafirman al país su determinación, no solo por mandato constitucional y legal, sino por convicción democrática, de su absoluto respeto por todas las libertades”, concluye el comunicado oficial.

Boscán, en un extenso relato, dio detalles sobre seguimientos a él, su esposa Mónica Velásquez -también periodista de La Posta-, las hijas de los dos y otros familiares, que tendrían como trasfondo posibles atentados contra sus vidas.

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Los seguimientos, según información revelada por el periodista, estarían vinculados con el asesinado empresario Rubén Cherres, su amigo de Danilo Carrera (cuñado del presidente Guillermo Lasso) y la mafia albanesa.

Todo esto estaría relacionado con la investigación periodística que lideró Boscán en La Posta, que se denominó caso Gran Padrino y que exponía presuntos actos de corrupción en las empresas públicas durante el actual gobierno de Guillermo Lasso, en las cuales habrían estado involucrados Chérres, Carrera y el extitular de la Empresa Coordinadora de Empresas Públicas (EMCO) Hernán Luque, quien huyó del país.

Por lo expuesto, Andersson Boscán y Luis Vivanco informaron que presentarán una solicitud de medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIHD) para la protección de su integridad.

El propósito del pedido es que se ordene al Estado ecuatoriano que otorgue medidas que precautelen al equipo periodístico del medio digital que participó en la investigación del caso Gran Padrino. (I)

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