Comenzar el día con un desayuno balanceado y saludable es fundamental para mantener la energía y el enfoque a lo largo de la jornada. Sin embargo, en ocasiones, resulta un reto preparar comidas nutritivas cuando los ingredientes disponibles son limitados.

Afortunadamente, existen trucos sencillos que permiten crear desayunos ricos en proteínas, vitaminas y minerales utilizando solamente elementos básicos que tenemos a la mano y permiten sacar el máximo provecho a los ingredientes disponibles en casa.

Los frutos secos y semillas más bajos en carbohidratos que aportan grasas saludables, proteínas y fibra

Siete trucos para preparar un desayuno nutritivo

Come frutos secos

Agrega a tus desayunos algunos frutos secos.

Según Gastrolab, puedes complementar tus desayunos con frutos secos como las almendras, nueces o el maní para brindarle una mayor saciedad a tu estómago.

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Grasas saludables

Algunas fuentes de grasas saludables, como el aguacate o el aceite de olive virgen extra, aportan proteínas de origen vegetal y un alto contenido de ácidos grasos omega-3.

Incluye frutas y verduras

Si quieres promover la pérdida de peso y obtener más músculos, recuerda tener una dieta balanceada e integrar a tus comidas frutas y verduras, como coco, moras, plátano, brócoli, espinacas, entre otras.

Desayuno antiarrugas, antimanchas y bajo en calorías pero lleno de vitaminas, minerales y deliciosos sabores

Come proteínas de origen animal

El pollo, los huevos y el pescado son buenas fuentes de proteína. Foto: Freepik

No dudes en agregar pescado, huevos o pollo a tus desayunos, pues estos alimentos serán tu principal fuente de proteínas, te brindarán una mayor saciedad y completarán tu perfil nutricional, como indica Gastrolab.

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Combinar hábitos saludables

Llevar un estilo de vida saludable es fundamental. Según los expertos, debes combinar diversos hábitos beneficiosos, como seguir una dieta equilibrada y practicar ejercicio regularmente.

Consume lácteos bajos en grasa

Una excelente opción para un desayuno rico en proteínas es comer productos lácteos bajos en grasas, como leche deslactosada, queso bajo en grasa o yogur natural.

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Limita las porciones

Gastrolab también recomienda limitar las porciones de acuerdo a las necesidades de cada persona, consultando con un especialista para asegurar un consumo adecuado de proteínas.

(I)

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