Amanda Villavicencio: Los casos Metástasis, Purga y Plaga están mostrando a actores y operadores políticos que serían quienes mueven estas fuerzas que están detrás del crimen

Ocho meses después del asesinato de Fernando Villavicencio, este lunes 8 de abril está previsto que se inicie el juicio penal contra los cinco presuntos autores materiales del homicidio del excandidato presidencial, ocurrido el pasado 9 de agosto de 2023. La diligencia judicial está convocada para las 08:30.

Días antes, una de las hijas del excandidato y parte acusadora en el juicio, Amanda Villavicencio, habló con EL UNIVERSO de las expectativas entorno al juicio y de las impresiones que le han dejado las revelaciones de los casos Metástasis y Purga, que podrían arrojar luces sobre el crimen de su padre.

Los procesados que serán juzgados por el delito de asesinato son: Carlos A., alias Invisible y Laura C., alias Flaca, que serían cabecillas de Los Lobos; y Érick R., Alexandra Ch. y Víctor F. En la audiencia preparatoria a juicio, del 27 de febrero, fue sobreseído Óscar F., quien ya salió de la cárcel.

¿Cómo se han venido preparando para este momento?

Esperamos que la audiencia se dé con normalidad. Han habido algunas estrategias que han utilizado durante este tiempo los abogados, estos bandidos, para retrasar las audiencias. Cada vez que hay audiencia hay un sentimiento de dolor que revienta con mucha fuerza, el resto del tiempo estamos intentando salir adelante. (...) Hemos hablado con nuestro abogado, que es Antonio López, sobre las posibilidades. Lo que esperamos es que estas personas (los procesados) puedan tener la pena más fuerte. Es a lo que aspiramos. Si ellos (los procesados) tienen más información, (que) tengan la valentía de revelarla.

¿Cómo han asimilado que uno de los seis detenidos fue sobreseído?

La justicia que me ofrece este mundo es muy poca. Claro que deja un mal sabor. Entiendo cómo es el proceso. No pienso que hay corrupción, si yo viera eso quizás mi sentimiento sería diferente. Veo que intentan llevar el debido proceso de la mejor forma. Si el tipo (Óscar F.) estuvo ahí (en el lugar del crimen) y fue parte de los campaneros en el mitin (político en el que estuvo Fernando Villavicencio), pues necesitan más pruebas para demostrar eso. No veo yo que haya como que lo están liberando porque le pagó al juez o algo así. Me molesta que la justicia sea así, pero entiendo. Además, entiendo algo que es muy doloroso: mi hermana (Tamia) y yo tenemos la suerte de que hay un proceso en investigación del asesinato de nuestro padre. Somos un número chiquitito de quienes accedemos realmente a que haya algo de justicia, de verdad, de responsabilidad, porque la gran mayoría de casos de muertes violentas no se resuelven.

¿Cree que en el juicio salgan certezas o indicios que conduzcan a los autores intelectuales?

Me encantaría algo así. Pero pienso que, de alguna forma, si colaboran estas personas se pueden seguir dando más pasos hacia allá. Recordemos que siguen abiertas las recompensas (ofrecidas por Estados Unidos a cambio de información). Lo que entiendo en el tema legal es que en esta audiencia no tenemos como acceso a ir al tema de los autores intelectuales, sino que simplemente va a ser un juzgamiento de estos cinco procesados, que son los que quedaron (sobrevivieron) de los trece que eran al principio. (...) Cuando fue la audiencia (preparatoria a juicio) se leyó el testimonio del testigo protegido, eso arrojó mucha luz sobre la situación.

La Fiscalía señaló que el testimonio leído era un extracto y que otra parte es usada para investigar a los autores intelectuales...

Por supuesto. Pero no necesariamente siento que eso se va a exponer así nomás. Me encantaría. Pero pienso que como están trabajando en eso, más bien tienen cautela, porque se sabe del nivel de infiltración y manipulación que hay entorno a este caso. Yo, realmente, lo que espero de la audiencia (juicio) es que se lleve a cabo. De ahí a pensar que la audiencia nos va a dar más resultados, yo no me quiero ilusionar. Si sucede, sería genial. Prefiero ser muy cauta en mis expectativas.

¿Qué certezas le ha dejado el proceso judicial?

Lo primero que sé es que aquí hay un complot político. Que Fernando Villavicencio era el único candidato presidencial y un periodista con 40 años de trayectoria, que estaba dispuesto a luchar contra la narcopolítica y las mafias enquistadas en el Estado. Eso me hace entender la complejidad de la investigación. Llegar a los autores materiales es apenas un 15 % de la profundidad que va a requerir la investigación. También veo a una Fiscalía General del Estado, fuerte, enfrentándose a (los casos) Metástasis, Purga y ahora Plaga, desentrañando toda la toma de la justicia, de las instituciones estatales, que justamente es lo que Fernando Villavicencio venía denunciando. Para mí es fundamental que estos casos están mostrando a estos actores políticos, ejecutores políticos que serían, para mí, quienes mueven estas fuerzas que están detrás del crimen.

Un extracto de los chats entre Daniel Salcedo y Mayra S. será parte de la investigación de los autores intelectuales del crimen de Fernando Villavicencio

En los casos Metástasis y Purga ha salido información sobre Fernando como una amenaza a eliminar...

Fernando Villavicencio era la piedra en el camino de las mafias. En una entrevista que él da explica que los otros candidatos a los que se está enfrentando representan a las chequeras más poderosas del Ecuador. (...) Cuando lo asesinan, él era incómodo para las cuatro chequeras más grandes del país (...) A mi me muestra que todas estas fuerzas políticas estaban muy bien sin Fernando Villavicencio, haciendo las cosas a la vieja usanza (...) Todo lo que vemos que sale sobre las investigaciones de Fernando Villavicencio es que él tenía la razón. Todos los casos que él investigó eran ciertos.

Mayra Salazar en su testimonio anticipado acusó a Pablo Muentes de tráfico de tierras y dijo que ahí se podrían encontrar respuestas al crimen de Fernando. ¿Qué opina?

Cuando asesinan a mi papá, lo primero que pasa por mi cabeza es que ya lo anunció. Él hizo una denuncia pública en contra de (cinco exasambleístas) Pablo Muentes, Ronny Aleaga, Roberto Cuero y dos más. Cuando matan a mi papá, lo primero que yo quería era que los investiguen a ellos, porque es como la crónica de una muerte anunciada. Sin embargo, no funcionaba de esa forma, primero había que ir por los autores materiales; ahora voy entendiendo un poco más estos procesos legales. Cuando yo me iba a Guayaquil y hablaba con la gente, (yo) desesperada en ese momento, decía que desconfío de Pablo Muentes, y la gente temblaba. Yo hablaba con unas cinco personas diferentes y les temblaba las rodillas cuando yo decía ese nombre. Me decían que ese tipo tiene el control de todo en Guayaquil. Luego, en una conversación con alguien más, me dijo que un señor le dio información a mi papá y nosotros lo contactamos. Él nos contó la historia, la publicamos en nuestro portal. Y hablando con los asesores y gente de confianza de mi papá nos dijeron como cambió la actitud de Pablo Muentes con Fernando Villavicencio cuando él (Villavicencio) se enteró del tema de tráfico de tierras. (...) Cuando habla Mayra Salazar es algo que nosotros ya lo sabíamos, no es una novedad. Me alegra que ya sea parte de los testimonios de la Fiscalía, pero a veces siento que se hace mucho show, en lugar de ir hacia las profundidades del caso.

¿Tiene conocimiento en qué estado se encuentra la investigación de la denuncia contra los cinco exasambleístas?

No sé. He intentado, he preguntado, he visto qué se puede hacer, pero no tengo una respuesta directa de nadie. Pero veo también lo que está pasando. Mientras nadie me responde, me hace sentir que no me pueden responder. Me he vuelto una persona más paciente. Confío (que las autoridades) se están yendo por ahí, porque al final vamos dos de cinco: Ronny Aleaga, ya está huido y metido en Metástasis; Pablo Muentes (procesado en el caso Purga) está en la cárcel La Roca. Vamos dos de cinco, vamos a ver qué pasa con estos otros tres. No me parece que sea una coincidencia. Siento que la fiscal (Diana Salazar) tiene las intenciones de llegar al fondo del asesinato de mi papá y por eso no me apuro tampoco. Tengo paciencia. (I)