Tres días lleva Daniel Salcedo, procesado por delincuencia organizada en el caso Metástasis, en el área transitoria del Centro de Privación de la Libertad (CPL) de Cotopaxi, en Latacunga, luego que fue trasladado de la denominada Cárcel 4, en Quito, por pedido de la Fiscalía General del Estado. El investigado ingresó en esta última prisión el 19 de enero pasado.

A solo horas de que Salcedo ingresó a la Cárcel 4, luego de ser deportado por Panamá, país al que ingresó por vía aérea desde Colombia el 29 de diciembre pasado, la Fiscalía General del Estados solicitó al juez pertinente y al Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de la Libertad (SNAI) que el procesado en el caso Metástasis y por otros actos de corrupción no permanezca en ese CPL.

Según la Fiscalía, la Cárcel 4 fue concebida con el objetivo de garantizar la seguridad de exfuncionarios, mas no como un “privilegio”. Además, se recordó que Salcedo ya estuvo recluido en ese lugar, desde donde -incluso- publicó videos en sus redes sociales.

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Dentro del expediente del caso Metástasis existen conversaciones periciadas entre Salcedo y el narcotraficante Leandro Norero, en las que el primero le contaba de su situación en la Cárcel 4. Le dijo que tenía cocinero personal, que controlaba el economato de la prisión, que ordenaba cuando quería comida de fuera del CPL y que podía tener visitas cuando quisiera. La Fiscalía afirma que Salcedo es parte de la cúpula criminal de una organización delictiva que fue liderada por Norero para conseguir fallos judiciales y beneficios penitenciarios para alias Patrón, su familia y cercanos.

Daniel Salcedo, ecuatoriano de 36 años de edad que mantiene los alias DS y Bellito en el caso Metástasis, tiene dos penas en firme por lavado de activos e ingreso de objetos prohibidos a la cárcel; y por delitos relacionados con irregularidades en la venta de medicamentos e insumos para la pandemia de COVID-19 que vivió el Ecuador mantiene un llamado a juicio por delincuencia organizada y una pena de primera instancia de trece años de prisión por peculado.

Daniel Salcedo Bonilla en el aeropuerto Mariscal Sucre, en Quito. Fue deportado a Ecuador tras su detención en Panamá. Foto: Cortesía Policía Nacional.

Respecto del tipo penal de fraude procesal, en marzo de 2022, un tribunal de la Corte Provincial del Guayas redujo la condena de Salcedo de cuatro años a pena cumplida. En esta causa aún está pendiente que se lleve a casación esta sentencia.

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Para la Fiscalía, el que Salcedo sea llevado a un CPL común dará un mensaje contundente de que no habrá impunidad para quienes cometen actos reñidos con la ley. Lo que aparentemente se esperaría suceda en los próximos días es sacar de esa área transitoria a Salcedo, la cual es diferente a los pabellones de esa misma prisión, pues entre otras cosas, cuenta con celdas para uno o máximo dos reos de mínima seguridad (detenidos por delitos de tránsito o no pagar pensiones alimenticias), y transferirlo al pabellón de mediana seguridad.

Esta es la segunda vez que Daniel Salcedo es internado en el CPL de Cotopaxi. La primera se dio el 30 de enero de 2021, justo luego que se hizo público un video en el que están bailando él y otros dos procesados. El video fue realizado con un celular dentro de la Cárcel 4 en momentos en que Ecuador vivía los estragos de la pandemia por coronavirus. Dos meses después, un tribunal penal de Machala (El Oro) dispuso que por “precautelar la integridad” y evitar cualquier amenaza contra Salcedo, él debía volver a la Cárcel 4.

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Entre la información existente en los más de 222 cuerpos del expediente del caso Metástasis hay una conversación de julio de 2022 en la que Salcedo y Norero hablan de la lealtad de sus “amigos” una vez que ambos llegaron a ser apresados.

Ahí alias Patrón le confiesa en un mensaje enviado casi a la 01:00 que una vez le llamaron a él porque le querían ‘apretar’ a Salcedo, pero que Norero les “cortó de una” pese a que aún no le conocía a alias Bellito. Inmediatamente Salcedo le pregunta qué banda fue, a lo que Norero le responde que él no es “batracio” (sapo, soplón). La contrapregunta que recibe el capo narcotraficante es si la propuesta le hicieron cuando Salcedo estaba preso. La respuesta fue un sencillo sí.

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Norero reconoce que a los que hizo daño en su momento fue gente mala y Salcedo le responde aclarando en un mensaje que jamás le hizo daño a nadie, y en otro escrito inmediato completa la idea diciendo que no le hizo daño a nadie que no se lo mereciera. ”Yo nunca busco pito o problemas, pero si ellos actúan mal no puedo quedarme frío. Jamás me aproveché de nadie. Solo apoyé y apoyé. (...) Y mira tantos que apoyé y lo primero que hicieron fue robarme”, anotaba Daniel Salcedo.

“Ñaño, hasta amistades tuyas te regalaban para que te aprieten. Entre eso se te llevaron un Porsche”, le explicaba Norero, mientras Salcedo le escribía que le fueron desleales unos “super panas” y que le robaron descaradamente porque pensaron que nunca se iba a levantar. Ahí le confirma que el vehículo del que le hablaba era uno blindado que para ese momento lo tenía un socio de Norero. “Jaja, estás en todas”, le anota Leandro Norero.

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La conversación sigue cuando Salcedo le pregunta a su interlocutor que si era “Raulito” el que quería apretarlo. Norero le dice que ese era uno y que incluso había ‘gente sana metiendo cheque para que le jodan’. En una parte Norero le dice que hasta en vida JL, alias de Jorge Luis Zambrano, asesinado líder de Los Choneros, estaba en la lista, pero en otro mensaje más adelante el mismo narco le aclara que no era JL, sino gente cercana a él.

Hace pocos días, en su consultorio jurídico ubicado en pleno centro de Machala (El Oro), sicario intentó asesinar a uno de los abogados de Daniel y Noé Salcedo. Foto: El Universo

Salcedo exclama: “Chuta, y él (JL) supuestamente era mi pana y su esposa. (...) Yo apoyé hasta J para su salida”. Según DS, ellos le prestaron una finca cuando estaba en Manta trabajando. Norero le comenta que JL y su esposa eran sus compadres.

Durante la conversación sobre JL o alias Rasquiña y su asesinato en Manta en diciembre de 2020, a Salcedo le parece que a Zambrano lo regalaron, que fue muy confiado y que tuvo una seguridad malísima. Sostenía que con quienes aún se mantiene en “camellos” (trabajos) hablan de quién podría estar detrás de esos hechos.

En ese punto la conversación da un giro a que el cambio verdadero en la vida de los hombres, según Leandro Norero, lo hace Dios. A eso Salcedo le pregunta a alias Patrón sobre qué es lo que hará cuando salga de la cárcel y si cree que al salir de prisión serán diferentes. A esas fechas del 2022 Daniel Salcedo tenía 32 años y Leandro Norero, 36. (I)