El 14 de mayo asumirán sus funciones los nuevos alcaldes, prefectos y otras dignidades elegidos el pasado 5 de febrero. Hasta el día anterior las administraciones en funciones están en potestad legal de tomar decisiones y suscribir contrataciones.

En el caso del Municipio Metropolitano de Quito, durante los tres últimos meses ha contratado obras y servicios por $ 49,3 millones y comprometido el presupuesto de 2023 en un 48 %. El alcalde Santiago Guarderas no participó como candidato en las elecciones recientes. El entrante jefe del cabildo, Pabel Muñoz, tendrá disponible el 52 % del presupuesto para los restantes siete meses.

De las 221 alcaldías del país, 125 las ganaron alianzas políticas compuestas por hasta 9 partidos

En contraste, la alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri –quien no logró la reelección–, desde el 6 de febrero hasta el 30 de abril ha adjudicado 285 obras y servicios por cerca de $ 10 millones. Esto representa para su sucesor, Aquiles Álvarez, que está pendiente de ejecución el 78 % del presupuesto del cabildo para lo que queda del año.

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Por lógica y responsabilidad las autoridades que entregan el cargo no pueden dejar sin cobertura la atención básica de la ciudadanía ni suprimir servicios u obras vitales. Una acción ética y de madurez política es que se deje a la siguiente administración la suscripción de contratos que no son imprescindibles ni ponen en riesgo a ningún sector de la sociedad.

Cuatro de los 221 alcaldes electos en los comicios de febrero pasado tienen menos de 29 años de edad

Para lo demás están los organismos de control y la fiscalización que con toda seguridad llegará. La Contraloría General del Estado hará su trabajo, al igual que las nuevas administraciones.

La revisión de cuentas, estados fiscales, contrataciones y otros son potestad de las autoridades. Deben hacerse con total transparencia y dar paso a un trabajo inmediato en servicio de la comunidad que les dio su confianza en las urnas.

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El éxito de las administraciones que inician funciones el domingo favorecerá a todos y por ello deben contar con el apoyo y unidad más allá de banderas políticas. Las elecciones ya pasaron, ahora hay que ir hacia adelante. (O)