Si al verte en el espejo lo que observas no es de tu agrado, aún siendo guapo y con una musculatura desarrollada, pudieras estar frente a un trastorno mental que en la medicina denominan como vigorexia. TopDoctors explica que los más afectados son los hombres entre edades de 18 a 35 años, que se obsesionan con su apariencia.

Añade este sitio web que la persona se fija en la mente la necesidad de que su cuerpo se vea con una musculatura súper desarrollada. Y aunque ya la tenga, nunca será suficiente por lo que acude a una dieta alta en proteínas y carbohidratos, acompañada por esteroides para lograr efectos inmediatos.

Esa distorsión mental desencadena malos hábitos alimenticios por una inconformidad perenne de su cuerpo y de cómo ellos se ven. A decir de Robin Rica, director de la Unidad de Trastornos Alimentarios de Instituto Centta, no se conocen hasta los momentos las causas de este trastorno, pero los médicos pueden diagnosticarla en personas con baja autoestima.

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Esta personalidad es la condición mental propicia para que nunca se vean bien, con el agravante de que buscarán la “perfección” de sus cuerpos. El mencionado especialista añade a los pacientes con problemas de obesidad, como otra población que puede padecer vigorexia, pues siempre han mantenido una lucha con el sobrepeso, y si ya lograron quitarse unos kilos, pueden obsesionarse con la imagen musculosa. (I)

Muchas personas con vigorexia comienzan a consumir sustancias como hormonas y anabolizantes esteroides para estimular el desarrollo muscular, con los riesgos que conlleva.