Como un regalo único describe Consuelo Hidalgo a las obras de arte. La gestora cultural y propietaria de su propia tienda de arte afirma que obsequiar un cuadro o una escultura es un acto de amor que demuestra lo que significa esa persona para la otra. Y esta Navidad es una gran oportunidad para hacerlo con los seres amados.

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“Una obra de arte tiene todo un trasfondo, un estudio, una historia, y tiene una energía, que nos transmite, ya sea por la composición, por los colores”, menciona Hidalgo, quien entre su colección tiene trabajos de artistas contemporáneos que han ganado los diferentes salones de pintura.

Hidalgo, quien se considera una narradora de historias, brinda un asesoramiento personalizado a cada persona que la busca para adquirir una pintura. “Mis cuadros no son simplemente algo decorativo, sino que se vende una historia por detrás, y es algo muy personal, porque la gente tiene que conectar con esa obra. Luego hay que probar la obra en la casa de la persona, porque la iluminación es distinta, el ambiente es distinto, y la persona tiene que sentirse cómoda con eso”, dice la mujer que recuerda que el primer cuadro que compró en su vida fue uno de Roberto Noboa.

Al momento cuenta con unos 50 cuadros que están disponibles para la comercialización. Para contactarla puede visitar su página en Instagram: @consuelo_hidalgo_art.

David Orbea, director de Espacio Onder, considera que una pieza de arte es sin duda un regalo ideal para estas y otras fechas. “Más allá del plano estético, el contenido que tiene una obra invita a reflexionar, a investigar, a conocer más el trasfondo de lo que quiere hablar el artista”.

El también artista visual afirma que Guayaquil es el principal mercado que adquiere piezas de arte. “En Guayaquil hay un mercado incipiente que está interesado bastante en el arte emergente”.

La misión principal de este espacio cultural es visibilizar el trabajo de los artistas emergentes, por lo que su catálogo incluye desde ilustraciones, fotografías, pinturas, esculturas y dibujos de exponentes como Andrea Moreira, Ricardo Bohórquez, Carlos Figueroa, Byron Toledo, Kimberly Yagual, entre otros. Puede acceder a su variado catálogo a través de su cuenta de Instagram @espacioonder, donde también puede sacar una cita para ver las obras personalmente.

¿Cómo elegir la obra ideal?

Lo primero que hay que tomar en cuenta al momento de elegir este tipo de regalo es el presupuesto. Depende de esto, se puede elegir un óleo, un acrílico, una acuarela, una serigrafía, o un boceto. “Debe fijarse en los gustos de la persona, si es más contemporánea, si es más de cosas figurativas, o más de formas abstractas, o qué tipo de colores le gusta”, explica Hidalgo.

Entre los autores que más se venden, la gestora menciona a la familia Gavilanes, Miguel Mera, Raymundo Valdez, Chay Velasco, y Jimmy Lara.

El acto de regalar un cuadro o escultura puede ser un acto tradicional que se desprende de los padres de un recién casado, ya que lo ven como un detalle perfecto para el nuevo hogar. “En estos casos me compran bastante arte contemporáneo, con colores, geometría, tendencias”, afirma.

También se puede tomar en cuenta si la persona a la que le va a obsequiar el cuadro es coleccionista de un artista en concreto, para continuar con esta afición. ¡Qué más ideal que eso!, ¿verdad?

La gestora indica que una obra de un artista emergente puede estar valorada hasta en $ 3.500, mientras que la de uno consagrado puede adquirirse hasta en $ 15.000.

En tanto, en Espacio Onder se pueden encontrar piezas de artistas emergentes en $ 100, $ 300, $ 600 y $ 2.500, dependiendo de su formato, autor y técnica. (I)